¿Aficionado¿ o ¿fan¿ son algo más que palabras que definen a los seguidores de un equipo deportivo. Se han erigido en un verdadero objetivo a perseguir por empresas de cualquier sector. En un entorno tan dinámico, donde el perfil del cliente cambia a golpe de oferta, la lealtad representa un valor que se cotiza al alza. Pero ¿qué variables dirigen una marca hacia sus potenciales fans, o viceversa? Se hace necesario un cambio en la estrategia comunicacional con el cliente, poniendo el foco en las emociones y en su influencia en el acto de compra. La disciplina deportiva es la que más sabe de fans, por lo que son recurrentes los paralelismos del márketing con ella para ayudar a entender el concepto. También son diversos y curiosos los casos en que determinadas marcas abordan anuncios y eslóganes publicitarios que logran convertir a los consumidores en auténticos fans de sus productos
