Podemos ilustrar el objetivo de este artículo con una pregunta nada reciente (Caglar, 1993) y, sin embargo, de poca divulgación y debate académico cuando se trata de
una relación entre la psicología y la educación, ¿hablamos de una psicología educativa o de una psicología particular aplicada en las instituciones educativas? Este artículo pre-
tende exponer un contexto histórico resumido sobre el ejercicio profesional del psicólogo en la educación y la escuela, y señalar dos procesos necesarios para su participación como psicólogo educativo: la intervención y la investigación. Por ultimo, se presentará una metáfora como propuesta de institucionalización del ejercicio psicológico en la educación: asegurar la calidad educativa.