Intentaré de manera sencilla explicar, desde un enfoque pragmático, los alcances de la posible reforma a la salud en Colombia, nada exhaustivo, con la intención de proporcionar elementos de discusión al lector casual, preocupado por la situación actual de la salud y lo que viene. Lo haré desde la perspectiva de un ciudadano común y corriente, pero también como parte del sector de la salud. Iniciaré mi reflexión comentando sobre lo malo y lo no tan malo de la Ley 100 a veinte años de ser promulgada. Después explicaré qué son las barreras de acceso refiriéndome sobre todo a la fragmentación de la oferta y la distinción entre acceso y cobertura. Daré posteriormente una descripción del flujo de recursos financieros del sistema actual y cómo la corrupción lo permea. Expondré después los cinco objetivos de la nueva reforma, empleando lo que falla ahora y lo que mejoraría después y cierro con algunas precisiones sobre lo que nos interesa de manera proximal como ciudadanos.
