La psicología Vocacional estuvo desde sus orígenes vinculada a ayudar a los jóvenes a afrontar problemáticas sociales. Las prácticas derivaron hacia el ajuste a las ocupaciones y a intervenciones para sectores favorecidos. Finalizando el siglo XX, en contextos de mundialización de la economía y el trabajo, sugirieron nuevos modelos para abordar necesidades de la mayoría de la población.