El debate epistemológico de la psicología es una constante a lo largo de su historia; no obstante, en las últimas dos décadas este debate ha perdido vigencia y son pocos los psicólogos que en sus investigaciones se ocupan de él, aunque se escucha la introducción del término paradigma, en lugar de corrientes, pretendiendo matizar la realidad del problema en esta disciplina; y cifrar mágicamente en esta referencia a paradigmas la solución a las inconsistencias epistemológicas verdaderas de su historicidad, tal como Foucault lo enseña. Pregonan además el nuevo paradigma de la complejidad para la psicología, poco conocido y definido e incluso ofertado para el psicoanálisis. Este trabajo pretende hacer una revisión general crítica de este panorama.