Los conceptos modernos occidentales de autonomía, de igualdad y derechos, se pueden entender como el resultado de un largo proceso histórico de sensibilización. Esta sensibilidad moderna fundada en sentimientos de empatía e identificación con las experiencias de otros seres humanos se vio amenazada, a principios del siglo XXI, después de los atentados en Nueva York, por una nueva posición que promovía no la igualdad sino la diferenciación cultural y la deshumanización del enemigo. En la formación de esta nueva política participaron algunos psicólogos y la Asociación Psicológica Americana (APA). A causa de las posiciones que tomó la APA un grupo de sus miembros decidieron transformarla internamente. Este ensayo pretende contar a largos trazos esta historia.