Nuestra ponencia se halla bajo una doble inspiración. En primer término, se inscribe en el marco de la invocación hursseliana a un "retorno al mundo de la vida", como forma de enfrentar la crisis de las ciencias y de la cultura. En un segundo término y en conexión con la inspiración anterior, consideramos vigente el llamado de Wilhelm Dithey a una "Crítica de la Razón Histórica".