La crisis contemporánea de la ciencia y su método ha puesto nuevamente en el centro de la discusión temas fundamentales como la validez y el avance tanto de las ciencias positivas como de las ciencias sociales. Durante el proceso de consolidación del mundo moderno, la confianza en el método científico y en los conocimientos que de él se desprendían, abrió las puertas a un nuevo proceso que terminó con la participación técnica e industrial de las nacientes sociedades.