El presente artículo tiene por finalidad presentar algunas reflexiones en torno a las posibilidades que la escuela actual brinda a los niños de desarrollar la inteligencia: y denota como uno de los requisitos para lograrlo incrementar el conocimiento que el maestro tiene del alumno a través de un diagnostico legítimo. Ésta es una alternativa para combatir uno de los grandes problemas que se viven en las aulas: la marginación académica.