En este artículo el autor crítica la concepción generalizada de concebir la democracia básicamente en términos electorales; señala que hay tres etapas diferenciadas: las condiciones (libertades) para que, entre otras cosas, puedan darse las elecciones, las elecciones mismas y lo que viene después: el gobierno democrático propiamente dicho. Enfatiza que se puede elegir democráticamente pero no gobernar de esa manera. Apunta 23 características indispensables de la democracia sin las cuales no podría, con propiedad, hablarse de democracia.