Hacer la liberación en un contexto de opresión, explotación, violencia y violación de los derechos humanos, supone primero pensar, reflexionar sobre lo que es liberar y a qué tiende dicha actuación. Es necesario pensar, meditar el actuar de la liberación y así evitar el peligro que nos advierte Theodoro Adorno al hablar de una "praxis irreflexiva"