El uso de provisiones y deterioros como prácticas de contabilidad creativa y la necesidad de estándares internacionales de contabilidad con una perspectiva del inversos; en concordancia con los códigos de gobierno corporativo, son algunas de las causas para que el Marco Conceptual IASB-FASB 2010 no incluya el criterio de prudencia, ampliamente utilizado en las regulaciones contables latinas, que se verían avocadas a realizar nuevas adaptaciones derivadas de la consecuente publicación de estándares con criterios menos conservadores, como la NIIF 13.