El concepto de apego es introducido por Bowlby con el propósito de comprender el efecto nocivo de la separación precoz en el desarrollo afectivo infantil. Con su introducción Bowlby pretendía obtener una rápida puesta en obra de intervenciones eficaces en salud pública y evitar formulaciones complejas que dificultaran la interpretación de resultados. El pragmatismo de este tipo de conceptos no se opone necesariamente, sin embargo, a una construcción psicopatológica. Por el contrario, una reflexión de este orden, más allá de los criterios de evaluación, nos permite un acercamiento cabal a los complejos procesos de organización precoz del aparato psíquico y de la subjetividad, permitiéndonos un análisis global no sólo de los efectos patológicos de la separación sino también del tipo de intervenciones que podrían modificar la evolución en algunos casos. A partir de un análisis histórico que considera las condiciones de la introducción de este concepto, el presente artículo propone una discusión respecto de la noción de pulsión de apego que, saliendo de los criterios predefinidos del modelo de observación científico, permite entender el valor de la psicoterapia en ciertas situaciones relacionadas con el apego.
