Autores: Mónica Yamile Pinzón Bernal, María Mercedes Naranjo Aristizábal, Andrea del pilar González Marín, Julialba Castellanos Ruiz.
Resumen
El desarrollo del control postural es un aspecto esencial de la evolución de acciones complejas como la locomoción y la manipulación, el cual se caracteriza por la aparición y maduración de patrones que relacionan los impulsos sensoriales, que informan la posición del cuerpo respeto al entorno, con las acciones motoras que se van ganando como consecuencia de la maduración de los diferentes sistemas que gobiernan el cuerpo y la relaciones del sujeto con el entorno, lo cual es fundamentado desde la teoría de sistemas propuesta por Nicolai Bernstein (1896-1966)1, la cual sugiere la importancia de reconocer cómo el movimiento surge de una interacción entre el individuo, la actividad y el entorno en que se realiza la acción. Por tanto, no es solamente el resultado de programas motores específicos de los músculos o de reflejos condicionados, sino que se produce por una interacción dinámica entre los sistemas perceptivo, cognitivo y de acción2, 3