Un trabajador industrial que no ha dormido en un año empieza a dudar de su propia cordura. El maquinista es una película sobre el papel tan importante que juega el inconsciente en la vida humana, el protagonista de la historia, un operario que lleva casi un año sin dormir y al que su condición le ha llevado a un progresivo deterioro físico y mental. Trevor parece sufrir de alucinaciones, vive en un perpetuo estado crepuscular absorto en su delirio de persecución y de sus obsesiones, sus recuerdos y sus percepciones parecen estar en continua confusión. Puede afirmarse que el maquinista es una película en la que se juega con la dualidad entre lo vivido y lo soñado, entre lo real y lo simplemente percibido por una mente alterada.