En este trabajo nos proponemos analizar la posición de Guerrero como lector de Heidegger, particularmente las continuidades y discontinuidades conceptuales entre la propuesta metodológica del filósofo argentino de una “estética operatoria” y el ensayo sobre el arte del pensador alemán. Nos concentraremos en el primer tomo, Estética operatoria en tres direcciones. Revelación y acogimiento de la obra de arte y el ensayo “El origen de la obra de arte”. Nuestra hipótesis es que Guerrero es un lector antropófago: si bien Guerrero adhiere a algunos de los planteamientos de Heidegger en su ensayo sobre el arte, el filósofo argentino es también crítico y, a partir de la lectura de “El origen de la obra de arte”, elabora un pensamiento original y propio. Específicamente, Guerrero toma, sostenemos, la metodología fenomenológico-hermenéutica y la aplica de un modo original a la obra de arte.