Etnoeducación es un término que el equipo de la Fundación Cerezales Antonio y Cinia utiliza para abordar la relación con el vecindario en el que se inscribe el trabajo que desarrolla. Es un conjunto de metodologías que se apoyan en la escucha, el diálogo, la investigación y la práctica. La experiencia narrada en el artículo resume la forma de trabajar en el territorio: contando siempre con sus habitantes y con una actitud de escucha ante saberes que siempre han estado ahí.
