La industria aeronáutica y aeroespacial fue una de las mayores impulsadoras de la ciencia e ingeniería de materiales durante el siglo pasado, del vuelo intercontinental de la gran cantidad de pasajeros, la llegada del hombre a la luna, la aparición del helicóptero, el lanzamiento de decenas de sondas especiales y los cientos de satélites activos que orbitan hoy por hoy en la tierra, no se hubiera logrado sin el desarrollo de materiales de características especiales, tanto para las estructuras aeronaves como para sus motores.