Cuando ya no hay paz. Solo en la noche. La última estrella. El gemido de un pobre. Cada vez más tinieblas. ¿Empieza a aclarear el alba? Una alondra canta sobre los arados. Si supiéramos adorar. No hay que despreciar nada. No se puede impedir al sol que brille. Más pobre que el leño muerto. Más lleno del sol que el verano