La tensión suministrada a un circuito debe ser lo más precisa y estable que sea posible, misión que asumen los reguladores de tensión. Estos dispositivos se ofrecen en dos versiones: lineales y conmutados, en función de la topología escogida. Entre los reguladores lineales, los de tipo LDO ganan terreno gracias a su capacidad de regulación de la tensión de salida y a su mayor precisión. Por lo que respecta a los reguladores conmutados, las opciones son más amplias dado que son varias las topologías y las variantes desarrolladas. Los fabricantes de este tipo de circuitos están dedicando gran parte de sus esfuerzos a introducir mejoras en aspectos como el rendimiento, el nivel de ruido generado, la precisión de la señal o las propias dimensiones. Y es que buena parte de sus aplicaciones corresponden a equipos portátiles en los que el espacio ocupado es muy valioso.
