Los dispositivos electrónicos y módulos de control registran una enorme demanda procedente de los sectores de consumo, industria, medicina y automoción. Para para cubrir las diversas exigencias de los diseñadores de equipamiento y de los usuarios finales, muchas aplicaciones están sometidas a limitaciones extremas en cuanto al tamaño; algunos ejemplos de ello son el tamaño de bolsillo a los formatos vestibles, que o bien se ajustan a los estándares consolidados o sustituyen a la tecnología más antigua, como las bombillas incandescentes o satisfacen las limitaciones de encapsulado en aplicaciones como las unidades de control electrónico en el automóvil.