¿Qué ocurre cuando las TIC se insertan en un enfoque educativo preexistente? Un principio esencial es situar a la persona en el centro del aprendizaje y no a los contenidos. Así, el alumnado y no el currículo se erige en protagonista del proceso educativo. En este contexto, las TIC añaden nuevos elementos a esta autonomía y lo que antes era una experiencia individual se convierte en colectiva. Dejan de ser herramientas para constituir la base de las relaciones de aprendizaje.