Desde la perspectiva comportamental, un área del comportamiento patológico comunmente abordado por medio de técnicas aversivas es el alcoholismo; tipicamente considerado como una conducta de exceso (Kanfer y Saslow, 1964). Las técnicas avesivas han varidado desde el uso de drogas eméticas (Voegtlin, 1940), choques eléctricos (Rachman, 1965) y drogas paralizantes, hasta imágenes aversivas (Anant, 1967) y control aversivo de la bioretroalimentación de la concentración alcohólica sanguínea (Lovibond y Caddy, 1970); siguiendo modelos de condicionamiento clásico (Voegtlin, 1940), castigo (Solomon, 1964), condicionamiento de evitación (Feldman y McCulloch, 1965; Hsu, 1965) o una combinación de ellos (Morosko y Baer, 1974)