Las anomalías en la señal de alimentación, como variaciones súbitas de la tensión o caídas por debajo del nivel nominal, pueden crear problemas que afecten a cualquier sistema electrónico, y específicamente al microcontrolador. Esto puede ser especialmente grave si no se detecta hasta la fase de producción. Con el fin de superar estos problemas existen circuitos supervisores, como los descritos brevemente en el artículo, que protegen al microcontrolador.