Los osciloscopios y los analizadores lógicos son instrumentos que han venido ocupando tradicionalmente lugares contiguos en el banco de trabajo del diseñador digital. Durante el proceso de diseño y depuración, estos dos instrumentos desempeñan funciones muy específicas y al mismo tiempo sumamente independientes. Sin embargo, su utilidad converge cuando los diseñadores necesitan correlacionar anomalías en los datos digitales con características analógicas de las señales.