El desarrollo de dispositivos, equipos y sistemas electrónicos ha ido experimentando sucesivos avances desde que hace décadas surgieran los primeros componentes discretos, con incrementos en paralelo de su rendimiento. La complejidad de las tareas asignadas sólo pueden asumirla en la actualidad componentes altamente integrados cuya evolución más reciente es el sistema embebido. La integración de funciones en una pastilla de silicio es precisamente la base de este tipo de sistemas, omnipresentes en un creciente número y variedad de aplicaciones.
