En las redes de sensores inalámbricos. Como las aplicaciones y los usos de censores son cada vez más amplios, se ha producido una gran demanda de sensores inalámbricos, especialmente en lugares de difícil acceso o condiciones externas (altas temperaturas, acidez, presión, etc.) y cuando el despliegue de cableado es problemático por motivos de distancia y costes de instalación.