Los requerimientos de los nuevos servicios han provocado el desarrollo de la Red Inteligente (RI). Su concepto se basa en estructurar cada servicio en una sucesión de acciones elementales, así como en la división las funciones de control avanzado respecto a las funciones básicas de conmutación y transporte. Creación y gestión y personificación son algunas de sus ventajas.