La distinción de Tellenbach entre "sintoma" y "fenómeno" pude ser una buena introducción para mostrar la originalidad de la aproximación fenomenológica. Esto nos remite al paciente y su historia, con un inicio, un después y un final. Sin embargo la "historia clínica" es también un trabajo de selección y de organización de los "datos" obtenidos de la observación clínica y de la expresión del paciente: es la "representación" recortada sobre este material de base por parte del observador.