En la crisis (1934-7), Husserl da al tema de la psicología un tratamiento muy diferente al que había adoptado en obras anteriores, como, por ejemplo, el el artículo que preparó para la Encyclopaedia Britannica (1928-9). Mientras que el artículo para la Britannica consideraba a la psicología como una especie de estación en el camino hacia la filosofía trascendental, y a lo más como una ciencia puramente fenomenológica empeñada en fundamentar la psicología empírica sin más revelancia para filosofía transcendental que la de permitir un ejercicio en la puruficación de fenómenos intencionales, la Crisis magnifica la relevancia de la psicología hasta considerarla el "campo decisivo" para la se-era lucha entre el objetivismo fisicalista y motivación transcendal.