La ikastola se autodefine «nacida de un movimiento popular y como una entidad escolar euskaldun comprometida con la transmisión, desarrollo y potenciación del euskara y de la cultura vasca» (EHIK, 88:15). Este carácter de movimiento popular dinamizador de la lengua y la cultura vasca que marca el nacimiento de las ikastolas a partir de los años 60 se ofrece como alternativa educativa e iniciativa popular frente a la escuela estatal entonces existente y caracterizada como símbolo de aculturación y colonización ideológica y política.