Los cambios sociales de hoy han generado transformaciones en las percepciones y enfoques de la educación y en la manera como el discurso y la pedagogía asumen sus requerimientos sociales. El desarrollo profesional del profesorado a partir de la evaluación de docentes supone la existencia de un nuevo paradigma en el campo de la educación y, por ende de la evaluación, paradigma negado a la noción de maestro como intelectual de la educación y a noción de comunidad académica articulada por prácticas pedagógicas alternativas y por prácticas de producción de conocimiento.