El deterioro cognitivo leve (DCL) se presenta como una de las entidades clínicas que mayor interés despierta en el ámbito de la neurociencia cognitiva, por la dimensión de sus cifras y la posible evolución de algunos de los subtipos a demencia. Este trabajo tiene como objetivo poner a prueba un método y procedimiento de clasificación del DCL en función de las puntuaciones en las pruebas neuropsicológicas y de su convergencia con un criterio clínico establecido, así como analizar las diferencias entre los grupos resultantes. Tras la aplicación de los criterios de inclusión-exclusión, se evaluó mediante una batería de pruebas neuropsicológicas a 39 personas con edades entre 60 y 89 años. Se establecieron grupos de diagnóstico mediante un criterio psicométrico y un análisis de conglomerados, obteniéndose resultados satisfactorios al analizar la coherencia entre ambos criterios. Destaca la importante cantidad de sujetos con diagnóstico de DCL (43.6% y 53.9% en función de cada uno de los criterios), observándose en éstos un menor nivel de escolarización que los sujetos sanos. Es necesaria la prevención del DCL y la definición de los subtipos, además, el uso de criterios objetivos, con rigor científico y que evalúen diferentes dominios cognitivos, se muestra como un adecuado mecanismo para su análisis y diagnóstico.