El artículo presenta un novedoso planteamiento, sobre la alternativa de aumentar los niveles de ocupación, en un escenario de disminución de la pobreza y miseria, a partir del subsidio directo de la mano de obra por parte del Estado, hasta lograr que el inversionista, pueda conseguir en el mercado, salarios similares a los de la República Popular China, dentro de unas políticas complementarias de capacitación de la mano de obra y desarrollo de programa de ciencia y tecnología.