Señalamos a continuación tres errores, o mejor sofismas, sobre los cuales se ha venido fundamentando y se pretende legitimar el propósito de éste gobierno, con el fin de abrir un debate inteligente y digno entre quienes conformamos el campo intelectual de la educación y la pedagogía y quienes están convencidos de que la racionalidad técnica-instrumental es la única vía para mejorar la calidad de la educación en nuestro país.