Se ha postulado la existencia de una tolerancia diferencial de los padres hacia el comportamiento infantil. El constructo tolerancia parental se considera una variable compuesta por aspectos cognitivo-sociales como atribuciones, estilos parentales y emociones. El objetivo del estudio fue evaluar el sustento empírico del constructo y elaborar una escala, estableciendo su validez y confiabilidad. Las dimensiones incluidas fueron: intención, atribución disposicional, atribución de responsabilidad, afecto-enojo, afectoansiedad, expectativa de resistencia, fuerza en estilo parental, verbosidad, permisividad, reactividad excesiva. A partir del análisis factorial se obtuvieron tres factores: afectivo conductual reactivo, puesta de límites atributiva y atributivo, que explicaron el 40% de la varianza. La confiabilidad se evaluó a través de la consistencia interna (a = .74). Se concluyó que la evidencia empírica ofrece sustento empírico al constructo propuesto.