En el interconectado mundo de hoy, la movilidad humana es un aspecto principal que define al siglo XXI. En ella están involucradas personas de toda procedencia, tanto profesionales como sin cualificación profesional. Esta movilidad se manifiesta en diversas dimensiones: transferencia de personal entre las grandes compañías, millones de turistas, marineros en buques de pesca o transporte, refugiados en busca de seguridad, estudiantes extranjeros, quienes viajan por negocios, trabajadores que cruzan fronteras de países que demandan mano de obra y tienen déficit de población, gente que acude en tropel a los centros urbanos desde sus aldeas. La estabilidad tradicional y las referencias comunitarias tradicionales van en retroceso.