Hoy en día Internet y las nuevas tecnologías diversifican nuestras experiencias en relación con la lectura y la escritura. Por este motivo, el proyecto lingüístico de centro tiene que estar acorde con las prácticas de la sociedad actual y los nuevos textos digitales. La elaboración del proyecto comunicativo de centro constituye una oportunidad para repensar nuestras prioridades educativas y el papel que en él deben desempeñar las emociones.