La nanotecnología parece destinada, inevitablemente, a introducir en nuestra vida cotidiana nuevos productos como las nanopartículas que, como su nombre lo indica, se caracterizan por su tamaño extremadamente pequeño, invisible para el ojo humano. Dado que ya se encuentran nanopartículas manufacturadas en cosméticos, electrodomésticos, textiles, es obvio preguntarnos cuales, aparte de los beneficios, pueden ser los riesgos que ellas representan para la salud y el medio ambiente.