Director pedagógico de la Cooperativa Peñascal, dedicada a la atención de personas en riesgo de exclusión, Ibarrondo afirma que se puede trabajar y sacar adelante a los alumnos más difíciles, esos adolecentes expulsados de los institutos porque rompen con las todas normas y rechazan el aprendizaje. Relata el rencor con el que llegan a su centro y la urgencia inicial de reconciliarlos consigo mismo y con su entorno. Para ello utilizan estrategias que buscan encontrar los intereses de cada persona y construir de nuevo un itinerario vital y formativo.