La transición de la política atendida como debe ser, inherente a la condición humana, forja en los escenarios de la filosofía política en Grecia, encuentra un punto de quiebre y transformación, a comienzo de la modernidad, momento en la cual los presupuestos teóricos de Nicolás Maquiavelo, impregnado del pensamiento secular renacentista, irrumpe con una nueva lectura de la política, que en adelante estará centrada en el único fin objetivamente demostrable históricamente, el del poder y de la autonomía frente a la moral. En este ensayo se presenta una reflexión de los alcances de su pensamiento, el contexto y la vigencia en el mundo contemporáneo del realismo político.