El Estado no puede solucionar por sí solo los problemas del país, para ello requiere el apoyo de otros actores. De ahí la importancia de las alianzas público-privadas, por medio de las cuales generen compromiso para mejorar las condiciones sociales y económicas de las poblaciones más pobres del país. Un ejemplo de ello es el programa Aldeas "Uniendo voluntades para el desarrollo", de EPM.