Cuando la escuela se abre a la comunidad fuera del horario lectivo y niños y niñas pueden dedicar más tiempo al aprendizaje instrumental, sus resultados educativos mejoran ostensiblemente. Las fórmulas utilizadas son múltiples y van desde las bibliotecas tutorizadas y los clubes de ayuda, que son espacios extraescolares gratuitos donde se ayuda a hacer los deberes, hasta los learning mentors, alumnos mayores que ayudan a los más jóvenes.