Los pilares idealistas en los que descansa la educación internacional son la movilidad, la diversidad, la inclusión y la armonía. A la luz de ellos, la autora analiza las nuevas exigencias que afronta la Universidad y sitúa la internacionalización de la educación en un contexto histórico social. Ante los problemas globales a los que la internacionalización ha tratado de dar soluciones, el artículo destaca ejemplos actuales de implementación y dirige la mirada hacia posibles futuros.