Nuestro comentario se dividirá en tres partes: en la primera trataremos de presentar un breve resumen de las tendencias e inquietudes que se formularon a través de medios diversos, respecto al hecho eclesial de la Vida Religiosa y su contribución específica a la evangelización de este continente. En la segunda parte veremos lo que de hecho traen las Conclusiones de Puebla sobre los Religiosos. Intentaremos resumir los diversos apartados internos con el fin de dar una visión esquemática de conjunto. Reduciremos el material, sin traicionar el pensamiento. Finalmente, trataremos de subrayar las líneas claves de los datos obtenidos, abiertos siempre a las nuevas perspectivas o desafíos que Puebla nos ofrece, y que todos los Religiosos tendremos que vivir con el dinamismo de nuestra esperanza y con la fidelidad suprema de nuestra entrega total a Cristo y a la edificación de su Reino.
