En el plano teórico, hay en el marxismo elementos de análisis que son adquisiciones definitivas del espíritu humano frente a la realidad y que interpelan la conciencia cristiana. Pero el análisis marxista en su conjunto, además de reducir extremadamente el horizonte de la investigación sociológica, implica el materialismo dialéctico. En este último, un discernimiento descubre todavía aspectos válidos. Pero, al fin y al cabo, propone una ética y una teoría global de la existencia radicalmente opuestas a la ética y a la fe cristianas