En el acto cultural fundante de la historia de la humanidad requiere necesariamente el proceso que los teóricos contemporáneos de la antropología cultural denominan de proceso de "enculturación". El carácter social e histórico de la cultura, considerada como producto y obra del ser cultural que es el hombre, posibilitan la transmisión, la recepción y la reinterpretación de las categorías mentales, de las pautas de comportamiento, de las expresiones culturales, de las estructuras de convivencia social, de las técnicas conquistadas por un grupo cultural.