La riqueza que representa la exhortación apostólica Ecclesia in America puede generar una gran evaluación y proyección del trabajo pastoral en el continente. Una de las líneas fundamentales que marca el documento refleja el momento histórico que vivimos. La comunión y misión, son signos vivos de una Iglesia que solidariza con los más necesitados ya que la Iglesia "debe vivir con los pobres y participar en sus sufrimientos", testimoniando así con mayor credibilidad el amor infinito de Dios hacia todas las personas".