Más que de un caminar cronológico se trata aquí de exponer la interpretación del caminar Bíblico Latinoamericano, pero sólo desde la óptica de la Iglesia Católica y bajo el lente de la Federación Bíblica Católica. Con dos hilos conductores: La Biblia como centro de toda pastoral eclesial y la Espiritualidad como expresión de la vocación bíblica de nuestras comunidades. Desde antes, hasta después del Concilio, marcando el acento en los grandes logros que en este campo ha significado en acontecimiento Aparecida. Ese caminar de la Biblia por América Latina, tiene en cuenta muchas veces, más que la Pastoral Bíblica en sí misma, el lugar que la Sagrada Escritura ha tenido en la Iglesia. El autor ha caracterizado este camino en tres etapas bien significativas: cuatro decenios de siembra; cuatro siglos de hibernación y cuatro decenios de germinación. Para concluir que el alma bíblica de Aparecida es su concepto de discipulado misionero y que en relación con él se asumen sus dos pulmones de respiro bíblico: la lectura orante y la animación bíblica de la pastoral.
