Hoy, más que nunca, cobra relieve inusitado la figura pontificia de Su Santidad Pío XII, por ser éste el Año Santo, "el año del gran retorno, el año de gran perdón", como acertadamente la llama el Sumo Pontífice. Siempre interesado en el problema social, atribulado y conmovida cada vez más por las complejidades de la actual vida internacional
